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La gran “estafa de los quesos” en Chile
En Chile, todo un pueblo rural, con el alcalde a la cabeza, además de miles de personas en todo el país, fueron estafados por una hábil mujer francesa en más de 2 millones de dólares, según los informes de prensa.La francesa Gilbertte van Erpe, de 66 años, y sus cómplices ofrecieron a los incautos la producción en serie de pequeños hongos de quesos, que serían exportados a Francia para ser utilizados en cosmetología.El número de víctimas del millonario engaño alcanza a 5.500 personas, la mayoría de la localidad rural de Coltauco, a unos 130 kilómetros al sur de Santiago. Atraídos por el aparentemente lucrativo negocio que ofrecían los estafadores incluso cayó en el engaño el alcalde de la vecina localidad de Peumo, Elías Cid.La francesa Van Erpe, quien aparece como la cabecilla del grupo, se encuentra prófuga y el fiscal que investiga la estafa giró una orden de captura internacional a Interpol de la mujer.El negocio tiene su origen hace más de un año, cuando la empresa Fermex-Chile invitó a participar a quien quisiera, con una cuota inicial de 460 dólares.Por esa cantidad se les entregaba un sobre con bacterias cristalizadas que debían cultivarse por dos semanas en un litro de leche.Al cabo de ese tiempo cuajaban y se convertían en 10 pequeños quesos que luego volvían a vender a Fermex para ser exportados a Francia, donde supuestamente se utilizarían en la fabricación de cosméticos.Los sobres se entregaban semanalmente y en dos meses se recuperaba la inversión inicial, para luego obtener ganancias tras ganancias.También se obtenían recursos adicionales si se invitaba a participar a más y más gente.Muchos de los afectados dejaron de trabajar, invirtieron los ahorros de toda su vida o se embarcaron en suculentos créditos que pretendían saldar en pocos meses:Nunca se llevó a cabo la exportación de los hongos de quesos. La producción de los quesos cosméticos, no comestibles, era financiada por las víctimas, muchas de las cuales confesaron que se endeudaron en préstamos bancarios.El negocio inicialmente no despertó sospechas por cuanto algunos de los involucrados recibieron el pago por los quesos que producían. Ello sirvió de gancho para que otros lugareños entraran en el “negocio”.Informaciones de prensa señalan que la misma estafa fue realizada antes el 2004 en Perú, el fraude se montó a través de la empresa Labomax, cuyo máximo directivo Homero Alcalde se encuentra en prisión por un fraude estimado en 27 millones de dólares. También ahí aparece vinculada la supuesta y misteriosa ciudadana francesa.
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